Uno de los viernes que fuimos
a Yécora para hacer deporte, nos encontramos a Justino que es el alguacil del
pueblo. Él nos pregunto que si algún grupo estaba haciendo albañilería y
dijimos que sí, que nosotros lo estábamos haciendo. Nos dijo que tenían una
necesidad en el cementerio, que había que tapar y lucir unos nichos. Nosotros
aceptamos la propuesta porque creímos que así ayudábamos al pueblo, aprenderíamos
más y sería nuestro primer trabajo de albañilería fuera del centro.
La siguiente semana nos pusimos en marcha: primero
calculamos en clase de matemáticas, entre todos, el material que había que
comprar y realizamos un presupuesto de los gastos que supondría. Después fuimos
al cementerio; el primer día empezamos a
tapar los nichos y lucimos alguno. Ya era hora de marcharse y no pudimos tapar
muchos nichos por que teníamos poco tiempo. Era muy divertido trabajar en un
cementerio.
Ya hemos subido 4 días a
realizar el trabajo.
Ahora solo nos falta tapar
un nicho y lucir algunos. Nos falta muy poco para acabar nuestro trabajo, el próximo
día seguramente lo acabaremos y si lo acabamos, la semana que viene iremos a celebrarlo. Todavía
no tenemos seguro el sitio, pero lo más seguro es que vayamos a la ermita de Yécora.
La próxima
vez que escribamos en el blog, os contaremos qué tal nos ha ido. :P